Esta es la historia de G.
un joven egresado de la carrera de Filosofía con ideas revolucionarias, él
tenía la ilusión de ejercer la docencia, trabajo muy duro para prepararse y
entrar en una de las mejores escuelas re-conocidas de su estado…cuando G.
empezó a impartir clases fue en la materia de epistemología una de tantas
que lo llenaban como docente, se sentía orgullo y a gusto donde estaba, tenía
una conexión emocional además de intelectual con sus alumnos, hasta el grado de
que a él lo colocaran del otro tachado al gran Otro con mayúscula, pero; su
ilusión le duro poco, porque se tuvo que enfrentar con las normas, reglas y principios
del sistema, aquí es donde choco la ley autoritaria con sus ideales liberales y
revolucionarios, corriendo el riesgo de perder hasta su empleo, no tuvo otra
opción que acatar las reglas institucionales hasta un cierto tiempo que no pudo
más con todo esto y decidió renunciar.
Después de un tiempo se
metió a estudiar la carrera de psicología y se dio cuenta que no estaba allí
para ayudar a las personas, sino para tener un soporte de sí mismo comprendió
que todos estamos cruzados por el deseo del otro esto impulsa al ser humano a
esa búsqueda de re-conocimiento, aceptación y comprensión para sí.
Esta pequeña e ilustrativa
historia lo represento muy claro con una frase de Andrés Manuel Jiménez en su
libro “La relación profesor-estudiante” cuando dice: “El profesor no lo sabe todo y
el alumno no lo aprende todo”[1] es decir; que no podemos llegar a la
perfección y a la completud esto es aceptar tu propia humildad de humano, así
lo hizo G. comprendió que para ejercer la docencia o para estar en el mundo pero
no pertenecer al mundo tenía que saber escuchar-se, comprender-se, aceptar-se
y reconocer-se…como en algún tiempo lo menciono la banda británica de
rock Pink Floyd “aunque
vayas en contra del sistema sigues siendo un ladrillo más en la pared”[2]
“La meta en la vida no es alcanzar la
felicidad, sino aprender a vivir con la insatisfacción y esto aspira a que seas
alguien mejor, aunque no garantizo que tengas una mejor calidad de vida, pero sí
que seas tú mismo” Francisco Javier Silva Espinosa.
Francisco
Javier Silva Espinosa
Lic. En psicología.
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